del pensamiento antiguo. Su contribución pedagógica consiste principalmente en:
Noción de Educación:
La educación es muy necesaria para el hombre, pues sin ella no daría un cumplimiento pleno a su ser. En la historia, esta es la primera vez que se le da un gran valor a la educación; con esto se hace posible que la educación se aun bien común para todos.
Contenido de la Formación Moral:
Desde la doctrina antropológica tomista, la formación moral se enfoca en las virtudes, las cuales responden al desarrollo de las potencias apetitivas humanas, que son:
Apetito Concupiscible = Templanza.
Apetito Irascible = Fortaleza.
Apetito Racional = Justicia.
Según la unidad de ser y de vida del hombre, es propio de esos apetitos ser conducidos por la razón hacia el bien; es lo propio de su naturaleza.
La formación moral consiste en la repetición de actos apetitivos que tienden al bien, esta es la vía para desarrollar las virtudes morales.
Su concepción de la Enseñanza y formación intelectual:
La formación intelectual se realiza por descubrimiento o por enseñanza. Para Tomás de Aquino aprender por descubrimiento es posible, pero es preferible la enseñanza. La enseñanza es una ayuda y el maestro es el colaborador del aprendizaje del discípulo, mediante el cual recibe el saber que se produce mediante el proceso de adquisición.
Encontramos tres momentos en el proceso de aprendizaje mediante la enseñanza, los cuales consisten en:
Exponer los principios del saber a la consideración del discípulo.
Llevar dichos principios a sus conclusiones propias.
Proponer ejemplos sensibles que los ilustren y permitan la formación de imágenes en el discípulo.
Santo Tomás de Aquino también establece cuatro tipos de sabiduría, las cuales son:
Filosofía Natural:
No depende de la razón humana, pues viene ya dado por la divina.
Filosofía Racional:
Corresponde a la lógica, pues es el dirigido a ordenar la actividad de la misma razón. Podemos decir que la lógica es materialmente un arte, pero formalmente una ciencia.
Filosofía Moral:
Consiste en la ordenación que la razón da a los actos de la voluntad.
Las Artes Productivas:
Es el cuarto saber, en el cual la razón ordena las cosas exteriores.
Se habla también de la Ciencia de la educación, nombre perfectamente válido al tratarse como hemos visto de una ciencia práctica interesada por las causas del quehacer educativo; el de Filosofía de la educación también es muy legítimo, pues dicha ciencia es de alcance filosófico al trabajar bajo la formalidad de lo perfectivo del hombre, de la virtud.